M-Experience es una marca que nació con la intención de unificar bajo un solo nombre la extensa variedad de servicios de ocio y restauración localizados en las estaciones de esquí de Aragón. Dentro de su cartera de servicios de terrazas, restaurantes y discotecas, sobresale ‘Marchica’, uno de los après-ski más famosos y valorados a nivel nacional.

“Nuestro público no identifica todos los servicios que tenemos bajo el paraguas de M-Experience, la experiencia integral de ocio en la nieve que ofrecemos; solo reconoce Marchica, que eclipsa a todos las demás en términos de notoriedad y reconocimiento. ¡M-Experience es más que solo Marchica!”.

Nos pusimos a ello, y creamos un Plan Estratégico de Comunicación 360 con acciones táctica y un nuevo tono de comunicación ‘rompedor’ para la mejora de su notoriedad de marca. Una de las conclusiones que puso de manifiesto este servicio de consultoría en comunicación, fue la necesidad de desarrollar una nueva identidad visual que funcionara como recurso principal para comunicar su nuevo posicionamiento, adaptada al contexto actual en redes; potente y diferencial, que fulminara a la competencia y, sobre todo, que fortaleciera los vínculos con todos los targets de su público objetivo.

Buscábamos transmitir la esencia de M-Experience: disfrutar no solo del esquí, sino de la mejor música y experiencias gastronómicas en un entorno único, las montañas nevadas de Aragón. La nueva identidad visual debía captar esta ‘experiencia integral’ y reflejar atributos como modernidad, irreverencia, exclusividad y diversión.

Para crear el elemento gráfico central de la identidad, el Zig-Zag, nos inspiramos en la forma del skyline de las montañas de Aragón, en el movimiento de los esquiadores al descender, la energía del público que disfruta de la música y la propia esencia dinámica de la experiencia que ofrece M-Experience.

El Zig-Zag permite desarrollar recursos visuales vibrantes y versátiles, adaptables tanto a medios físicos estáticos como a formatos animados para el mundo digital y redes sociales. Estos elementos se complementan con una paleta cromática que transmiten los conceptos de exclusividad y diversión, tanto de día como de noche. El negro en mayor proporción, asociado al ocio nocturno y la exclusividad junto al Royal Blue, un color usado históricamente por la realeza. La diversión durante el día lo expresa el blanco junto al Ice Blue, inspirado en el hielo ártico; unidos recuerdan visualmente a los paisajes nevados con cielo azul de las montañas de Aragón.